JUAN GONZALEZ
INTERPRETE DE LOS TAINOS
Juan Gonzalez Ponce de León, era natural del Reino de León, y viajó hacia las Indias en el Segundo Viaje de Cristóbal Colón. Estuvo viviendo por quince años en La Española, donde (por su habilidad con las lenguas) aprendió a comunicarse con los indígenas.
Llegada a Puerto Rico
En el 1508, acompañó a su Capitán, Juan Ponce de León a explorar la Isla de San Juan Bautista para servirle de intérprete con los taínos, ya que había aprendido su lengua también.
La primera parada, luego de salir de La Española, lo fue la Isla de Mona. Esta estaba bastante poblada por los taínos de Borikén, y fueron los que le indicaron la ruta por la costa sur para que pudieran encontrarse con Agüeybaná, el cacique principal de la Isla. Así, el 12 de agosto de 1508, desembarcaron en la Bahía de Guánica, cerca de la aldea de Agüeybaná. El yucayeque del cacique, al cual llamaban Guaynía, se encontraba cerca del Río Coayuco, en el actual Municipio de Yauco.
Con la ayuda de Juan González, Ponce de León pudo comunicarse con el cacique, y accedió a hacer un pacto de paz con Agüeybaná, conocido como guaytiao (según la costumbre de los taínos). Este consistía en intercambiarse los nombres, lo que significaba que, desde ese momento, serían amigos y aliados.
(Ver Cacique Agüeybaná en el siguiente enlace:)
Exploración de la Isla
Según revelan los escritos del lugarteniente Juan González, cuando su capitán llegó a conquistar a San Juan Bautista (Puerto Rico), le pidió realizar una exploración en la Isla, mientras él permanecía en la desembocadura del Río Guaorabo, cerca de un poblado indígena, en el área de lo que conocemos hoy como Añasco. Allí permaneció aproximadamente tres meses. Mientras tanto, Juan González, partió por tierra hacia el norte, con veinte soldados, cuatro marineros y quinientos nativos, para realizar la exploración. Su misión principal era investigar un puerto natural en la costa norte (la Bahía de San Juan), al que llamaron Puerto Rico. Este puerto lo habían visto en su llegada a las Indias, al pasar por el norte de la Isla en el Segundo Viaje de Cristóbal Colón.
Luego de haber ido a San Juan, cruzaron las montañas a caballo para trasladarse hacia el sur, y reunirse nuevamente con Juan Ponce de León. Y es desde la montaña que se presume, Juan González vio a la distancia a lo que conocemos hoy como el Municipio de Coamo. Por eso se le atribuye a Juan González el descubrimiento de este pueblo.
El historiador caborrojeño Salvador Brau nos narra que:
"Reconocido Puerto Rico (el puerto de San Juan) trasladóse la expedición a las playas del sur, cruzando una cordillera de altas colinas y cubiertas por exuberante vegetación cuyas accidentadas estribaciones descendían hacia el mar encuadrando valles extensos a los españoles parecieron propicios al fomento de ganados"
(Ver Fundación del Municipio de Coamo en el siguiente enlace:)
Aparentemente, la ruta que utilizó Juan González fue la que le enseñaron los taínos que llevó consigo en la exploración, y era la misma que utilizaban ellos para trasladarse de un lugar a otro en la Isla. Se cree que la ruta convencional de viajar entre la costa norte y el sur por el centro de la isla, era subiendo hasta Aibonito por la cuenca del Río Toa, o pasando entre Caguas y Cayey. Luego, desde Cayey, se bajaba al valle de Coamo, y de allí hacia el suroeste, por donde cruza la actual carretera de Coamo a Ponce y desde Ponce, continuaban hacia Guánica.
Además de esta ruta, utilizaban un camino a través de la Cordillera Central, que se conocía en una época como Camino de Puerto Rico. Este comunicaba a San Juan con el oeste de Isla, pasando cerca de los actuales Barrios Pellejas y Juan González, en Adjuntas; y el Barrio Paso Palma, en Utuado.
La batalla de Yagüecas
En el año 1510, el alguacil mayor de Puerto Rico, Cristóbal de Sotomayor, estableció un poblado en el yucayeque Yagüecax al oeste de la Isla, y lo llamó Villa de Sotomayor. Junto a un gran grupo de colonos españoles, y los taínos que le fueron asignados en las encomiendas, construyeron sus aldeas.
El cacique Guaybaná, quien fuera sobrino de Agüeybaná (según la ley de sucesión de los cacicazgos), fue uno de los taínos asignados a Sotomayor. A éste se le conoce también como Agüeybaná el Bravo, El Bravo o Agüeybaná 2.
En el 1511, Guaybaná organizó uno de los ataques más importantes contra los españoles. Para esos días, Juan Gonzalez escuchó a los nativos convocar una reunión que se llevaría a cabo en el yucayeque de El Bravo en Guaynía y, como le pareció sospechoso, fue a avisarle a Sotomayor. Sin embargo, aún no sabía el propósito de ésta. Así que, ambos planificaron que González se pintaría como los llamados indios para poder introducirse, y escuchar de qué se trataba. Y así lo hizo.
(Ver Diego Salcedo y la Batalla de Yagüecas en el siguiente enlace:)
Sin que ningún taíno lo notara, se infiltró, y pudo escuchar el plan de Agüeybaná El Bravo de acabar con la vida de Sotomayor, para luego matar a los aldeanos y quemar la Villa. Posteriormente, se trasladarían a Caparra, en un segundo ataque, para exterminar a los españoles que allí se encontraban.
Además de Guaybaná, en la reunión se encontraba el cacique Guarionex, con algunos nativos del yucayeque Otuao, lo que hoy se conoce como Utuado (ver el número 16 en el mapa a continuación).
Sigilosamente, Juan González se escurrió por el bosque, y pudo llegar a la granja de Sotomayor en Guaynía (número 17 en el mapa), para avisarle del inminente ataque. Este le insistió que partiera inmediatamente hacia Caparra, pero Sotomayor sentía la necesidad de ir hasta Yagüecax (número 18) a avisarle a los aldeanos sobre el ataque, para que éstos se prepararan. Su error fue pedirle prestado algunos nativos a Guaybaná para preparar su equipaje, ya que esto lo alertaría de su escapada.
Listo todo, partieron hacia el bosque Cristóbal de Sotomayor, Juan González, el sobrino de éste (Luis Juan Gonzalez) y dos criados. En total eran cinco los que huían. Ya de camino, Juan González pudo ver a la distancia, a un grupo de sobre cien indios que se acercaban cada vez más. Y cuando los alcanzaron, golpearon a González en la cabeza con una macana, y lo hirieron con tres flechazos. Este era el último del pequeño grupo, por eso fue el primero en ser alcanzado.
Asustado, le pidió perdón a Guaybaná, y le ofreció servirle de esclavo. En ese momento, éste le perdonó su vida y siguió tras Sotomayor, acabando con su vida y la sus otros tres acompañantes. Habiendo terminado con Sotomayor, regresaron en busca de Gonzalez, pero éste se había escurrido de la manera que había aprendido de los indios, y logró esconderse en lo alto de la copa de un árbol. Allí estuvo hasta tarde en la noche.
Según narra el historiador Salvador Brau:
Cuando más adelante el capitán Miguel de Toro, enviado por Ponce de León á honrar los despojos de Sotomayor, de aquellas víctimas, llegó al sitio de la catástrofe, hallóse á Sotomayor enterrado con los pies por fuera, y los cuerpos de su sobrino y los leales servidores que les acompañaban, enredados en los bejucales, sirviendo de pasto á la voracidad de las aves de rapiña. Don Cristobal, con el craneo deschecho á macanazos, mostraba treinta y seis heridas de flecha en todo el cuerpo.
(Ver: Cristóbal de Sotomayor y la Leyenda de Guanina)
Juan González, al ver que ya no corría peligro, decidió ir a Caparra, a contarle a Ponce de León lo que había sucedido. Este tuvo que abandonar la idea de avisarle a los aldeanos que estaban al oeste de la Isla ya que pensó que no llegaría a tiempo. Por eso éstos, sin sospechar nada, recibieron el ataque de Agüeybaná El Bravo, quien le quemó sus casas, y los atacacó con sus lanzas, macanas y flechas.
Los aldeanos se defendieron, pero no estában preparados ya que nadie les pudo avisar, y los tomaron por sorpresa. Ádemás, el número de nativos era mucho mayor, según narra el cronista español Juan de Castellanos. Se dice también que algunos caribes estaban en el grupo para ayudarlos a combatir a los españoles.
A esta revuelta se le llamó la Batalla de Yagüecas.
Defensa de los españoles
Uno de los españoles que estaba en la Villa al momento del ataque fue el Capitán Diego Guilarte de Salazar, quien le hizo frente a los nativos, formando una defensa con un grupo de vecinos. Estos lograron combatirlos con sus armas de fuego durante toda la noche, y reducir el número de sus oponentes, hasta que los dominaron. Así fue que al otro día pudieron preparar la retirada hacia Caparra. No sin antes, darle cristiana sepultura a los fallecidos.
Mientras todo esto ocurría, Juan González, quien se encontraba muy herido, subía por la Cordillera Central para llegar al Río Toa, y de allí hasta Caparra. Días después de haber llegado y de contarle a Juan Ponce de León lo que le sucedió a Cristóbal de Sotomayor, llegó Salazar con aproximadamente treinta aldeanos sobrevivientes.
El gobernador y comandante prepararon la defensa, junto con Juan Gil, quien había sido nombrado Alguacil Mayor por Juan Ponce de León, en sustitución de Sotomayor. Formaron cuatro grupos con ciento veinte soldados, y envió tres de éstos a Urayoán a combatir a los nativos. Sus capitanes fueron Luis de Añasco, Miguel de Toro y Luis Almansa. El cuarto grupo, lo dejó a cargo de Diego de Salazar, en Caparra. Este se mantuvo en la defensa de la Villa de Caparra, junto con los heridos.
Así, de la misma manera que hicieron los indios en la Villa de Sotomayor, el grupo de soldados tomó por sorpresa a los indígenas, mientras éstos celebraban otro areyto de guerra. Aventajándose en la batalla con sus armas de fuego, los españoles atacaron a los nativos, matando a su líder Guaybaná. Capturaron a unos, pero otros huyeron hacia los montes.
Luego de este primer evento hostil, el Rey Fernando ordenó esclavizar a los indios, marcándolos con una F en la frente. La orden iba tanto para los taínos, como para los caribes.
Islas Vírgenes
Posteriormente, el Alguacil Mayor Juan Gil, continuó comandando a los soldados en las guerrillas contra los taínos, quienes se habían unido a los caribes para atacar a los españoles. Así, los españoles llegaron hasta Vieques y Santa Cruz, y quemaron sus defensas. Además, planificaron una nueva expedición a Virgen Gorda, de la que Juan González participó. Allí destruyeron las villas y apresaron a los indios que no lograron escapar en sus canoas. Estos cautivos, y los de Vieques, fueron vendidos como esclavos por los oficiales reales.
Al perder su libertad, y ser sometidos como esclavos, muchos de los taínos murieron. Otros no pudieron sobrevivir a las enfermedades que les contagiaron los españoles. La debilidad causada por el trabajo y la mala alimentación, provocaron que no pudieran combatir los viruses, traídos por los españoles. En tan solo unos años, la población de los indígenas disminuyó considerablemente.
(Ver La Colonización de Puerto Rico y las Encomiendas en el siguiente enlace:)
Los últimos datos que encontramos sobre Juan González son de parte del historiador sangermeño, Don Aurelio Tió, quien supone que la localización de la estancia donde éste vivió, estaba ubicada en el actual Barrio Juan González, en los límites geográficos de Adjuntas. Esta hipótesis surge, tanto por el nombre del barrio, así como por una de las extensiones de la Cordillera Central hacia el norte de Adjuntas, que es conocida como la Cuchilla de Juan González.
Juan González y García
Como nota aclaratoria, Juan González Ponce de León y Juan González y García fueron ambos intérpretes españoles de las lenguas indígenas, pero son personas totalmente diferentes.
Cuando estábamos recopilando información para esta historia, encontramos confusión en algunos artículos, donde ubican a nuestro Juan González en México. Sin embargo, no es la misma persona porque, quien fue a México se conoce como Juan González y García, y nació en el año 1510. Esto significa que, cuando Juan Ponce de León llegó a Puerto Rico, éste no había nacido, lo que hace imposible que lo hubiera acompañado en su conquista. Además, el Presbítero nació en Valencia, y el lugarteniente de Ponce de León nació en León, al igual que su Capitán, por eso su nombre completo es Juan González Ponce de León.
Cabe señalar que se le adjudica al Presbítero Juan González y García ser el intérprete entre Juan Diego Cuauhtlatoatzin y Fray Juan de Zumárraga, primer obispo de México. Juan Diego fue el indígena que tuvo contacto con la Virgen de Guadalupe en México.
Bibliografía
Brau, Salvador. La colonización de Puerto Rico, desde el
descubrimiento de la isla hasta la reversión á la corona
española de los privilegios de Colón. Tipografía Heraldo Español, San Juan, 1907.
Cacique Agüeybaná. Histopedia de Puerto Rico. 25 de junio de 2021.
Caciques y Yucayeques de Boriquén. Histopedia de Puerto Rico. 19 de jul de 2019.
Coamo
Diego Guilarte de Salazar
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Diego_Guilarte_de_Salazar
Fundación del Municipio de Coamo. Histopedia de Puerto Rico. 11 de marzo de 2021.
Historia de Adjuntas
Juan Ponce de León. Histopedia de Puerto Rico. 20 de septiembre de 2019.
La Batalla de Yagüecas. Histopedia de Puerto Rico. 4 de noviembre de 2019.
Rivera, Agustín. El intérprete Juan González: es una conseja. Lagos de Moreno, Ausencio López Arce e hijos Tipógrafos, Plazuela del Molino, Letra J, 1896.
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